Nos disponemos a afinar los detalles de nuestras tan esperadas vacaciones, y es muy probable que, independientemente de dónde nos encontremos, el sol sea el gran protagonista de esta temporada. Por ello, es importante saber la mejor forma de disfrutar de esta época, cuidándonos y obteniendo la mayor cantidad de beneficios posibles.
Entonces, si planeamos conseguir un buen bronceado en las próximas semanas, ¿qué es lo más recomendable? ¿Debemos tomar sol durante el verano? La respuesta es un poco más compleja que “sí” o “no”. Vamos con ello.
Cuando nos exponemos al sol tomando todas las precauciones necesarias, resulta bastante beneficioso. Entre otras cosas, tomar un poco de sol nos ayuda a propiciar la formación de vitamina D (imprescindible para fortalecer nuestros huesos), y también impacta de forma positiva en nuestra psique, pues resulta agradable y mejora nuestro estado de ánimo, reduciendo el estrés.
Sin embargo, la radiación solar también puede presentarse como una amenaza para nuestra salud. Insolaciones, quemaduras cutáneas, formación de manchas y envejecimiento de la piel son solo algunas de las consecuencias más comunes de recibir mucho sol sin la protección adecuada. En ese sentido, los filtros solares son nuestro mejor aliado para protegernos de la aparición de cualquiera de estos problemas.
Os dejamos con algunos consejos para disfrutar al máximo de esta temporada y reducir al mismo tiempo cualquier impacto negativo para nuestra salud:
Con estos consejos, ¡estamos listos para disfrutar del sol este verano!