Cuando la mujer está embarazada, la actividad física es muy importante y muy beneficiosa, nos ayuda a tolerar el embarazo, a evitar el sobrepeso y a estar mejor preparadas físicamente para el momento del parto y la recuperación.
Se recomienda iniciarla después de los 3 meses de embarazo, evitando así el periodo de mayor riesgo de aborto.
Un deporte muy recomendable durante el embarazo es la natación, no posee riesgos si se practica con cuidado y sus beneficios para las futuras madres son importantes.
- Trabaja la fuerza y tonicidad muscular.
- Mejora la capacidad aeróbica, mejorando el sistema cardio-respiratorio.
- Aumenta la temperatura corporal y riego sanguíneo periférico.
- Proporciona sensación de alivio en las articulaciones.
- Ayuda a distribuir el peso del cuerpo por todo el cuerpo cuando se está en posición horizontal, y así no sobrecargar una zona en particular.
- Ayuda a controlar el peso.
- Puedes compartir experiencias con otras mujeres embarazadas.
Conociendo estos beneficios es bueno animarse a realizar esta actividad física, pero para ello es muy importante seguir unas recomendaciones y conocer sus contraindicaciones.
Recomendaciones:
- Informar a tu ginecólogo o matrona de la voluntad de hacer este deporte, y que te informen si supone o no un riesgo para tu embarazo.
- Informar a tu entrenador de la semana de embarazo en la que estás.
- Suspender la actividad si presentas dolor de cabeza, náuseas, dolor abdominal, mareos o excesivo cansancio.
- El ejercicio frecuente (3 veces por semana) es mejor que hacer ejercicio excesivo tras largos periodos de inactividad.
- Cuidar la espalda, evita posiciones y ejercicios que hagan flexionarla.
- Usar ropa de baño cómoda con sostén adecuado para proteger los senos aumentados.
Contraindicaciones:
- Incompetencia cervical
- Placenta previa.
- Hipertensión arterial Crónica o inducida por el embarazo.
- Amenaza de parto pretérmino.
- Problemas Vasculares.
- Patologías Cardiacas o Respiratorias.