Las pacientes con endometriosis que reciban un tratamiento previo con anticonceptivos durante 6 a 8 semanas pueden obtener mejores tasas de embarazo en fecundación in Vitro (FIV), según un estudio publicado recientemente en Fertility&Sterility.
Se trata de un estudio piloto realizado en dos centros de Paris y Ginebra, dirigido por el Dr. De Ziegler. En el mismo se han incluido un total de 795 pacientes, de las cuales 296 fueron diagnosticadas de endometriosis, por cirugía o ecografía, y 509 no tenían endometriosis y realizaron tratamiento de fecundación in Vitro por otros diagnósticos (grupo control).
Las pacientes fueron a su vez distribuidas en dos grupos: en el grupo 1 se incluyeron aquellas que recibieron pre-tratamiento con anticonceptivo oral (426 controles y 114 con endometriosis), mientras en el grupo 2 iniciaron el tratamiento de FIV directamente (83 controles y 172 con endometriosis).
Inicialmente se observaron diferencias en la edad entre los grupos 1 (más jóvenes), y 2 que, aunque estadísticamente significativa, fue pequeña y poco relevante. En la evaluación de los resultados de los ciclos todos los grupos se subdividieron a su vez en ≤ 37 años y ≥ 38 años. Se observó un mayor número de ovocitos recuperados en las pacientes con endometriosis que tomaron ACO para ambos grupos de edad, así como de embriones. La media de embriones transferidos fue similar en ambos grupos, aunque las pacientes con toma de ACO previo congelaron más embriones. La tasa de embarazo clínico fue muy superior entre las pacientes con endometrosis que tomaron ACO respecto a las que no, con cifras incluso similares a las pacientes sin endometriosis.
Estudios previos han mostrado un posible efecto beneficioso del reposo ovárico los meses previos a la FIV en pacientes con endometriosis, principalmente mediante el uso de fármacos del grupo de agonistas de la GnRH. La principal ventaja de los ACO frente a éstos es el menor numero de efectos secundarios. Dadas las limitaciones metodológicas del estudio, estos prometedores resultados deberán ser confirmados en nuevos estudios, preferiblemente ensayos clínicos.
Fuente: Fertil Steril 2010;94:2796-9