Cuidar nuestra alimentación es muy importante, sobre todo si estás embarazada, ya que necesitarás una mayor cantidad de nutrientes cruciales.
El ácido fólico es una vitamina hidrosoluble que se conoce también como vitamina B9 o folato y que resulta de vital importancia para el organismo.
Esta vitamina previene de posibles defectos neurales en el feto como, por ejemplo, la espina bífida. Además, el ácido fólico ayuda a la producción de células sanguíneas y participa en la producción de material genético, entre otras funciones.
Dentro de las funciones que realiza el ácido fólico en el cuerpo humano se encuentra implicación en los procesos de producción del material genético y su participación en numerosas funciones corporales (como formación de glóbulos rojos). El ácido fólico también contribuye a mantener las funciones del tracto intestinal y a prevenir ciertos tipos de anemias e incluso de cáncer (colon, mamas). Reproducción Asistida ORG
Las mujeres embarazadas necesitan ingerir suficiente ácido fólico, porque si tienes un ácido fólico bajo el feto puede llegar a tener anomalías congénitas graves conocidas como defectos del tubo neural. Medline Plus
Por eso, en fivmadrid hemos preparado este artículo para que sepas por qué es tan importante el ácido fólico en el embarazo.
Ácido fólico en el embarazo, ¿para qué sirve?
Uno de los avances más importantes, económicos y más efectivos que ha conseguido la medicina ha sido la administración de suplementos de ácido fólico a las mujeres embarazadas para disminuir de forma muy importante los defectos del tubo neural.
En las etapas muy tempranas del embarazo, el ácido fólico es vital para un desarrollo fetal adecuado. Una deficiencia de este hará que la capacidad de división celular se reduzca y el feto no crezca como debería.
Por tanto, aquellas mujeres que estén pensando en quedar embarazadas, deberán tener las dosis recomendadas de ácido fólico, ya que:
- Reduce el riesgo de dar a luz a un bebé prematuro o con bajo peso.
- Ayuda a prevenir los defectos del tubo neural, tubo que permite la formación de la médula espinal y del cerebro.
- Previene malformaciones congénitas.
- Reduce el riesgo de padecer espina bífida.
- Fomenta la producción de glóbulos rojos.
- Evita otras enfermedades congénitas.
Fuente: EGOM
Recomendaciones sobre el ácido fólico para el embarazo
Primero debemos saber que el tubo neural, que es el precursor del sistema nervioso del embrión, empieza a desarrollarse muy pronto. Por lo tanto, si la mujer no sabe qué está embarazada cuando se está desarrollando una estructura tan importante como el tubo neural, tiene que tomar ácido fólico en todo momento desde el día que ha tomado la decisión de buscar un embarazo.
La gran mayoría de las mujeres que desean embarazo, es decir, que planifican el embarazo deben tomar un suplemento con ácido fólico al menos de dos a tres meses antes de conseguir la gestación. Su consumo ha de mantenerse durante todo el embarazo y prolongarse durante el posparto (entre cuatro y seis semanas), o durante todo el periodo de lactancia materna si ésta se prolonga más. La dosis recomendada oscila entre 0.4 mg a 1 mg al día de ácido fólico.
Por otra parte, las mujeres con factores de riesgo para tener un hijo con un defecto del tubo neural deben llevar una dieta sana, rica en folatos, aumentando su consumo y añadiendo un suplemento de ácido fólico desde dos o tres meses antes de la concepción. En este caso la dosis debe ser mayor, se recomienda ácido fólico 5 mg embarazo, hasta la semana 12 de gestación aproximadamente. Posteriormente puede emplearse un suplemento convencional con 0.4 a 1mg de ácido fólico entre cuatro y seis semanas tras el parto. Su consumo se prolongará en el caso de las mujeres que decidan dar lactancia materna y hasta que ésta finalice.
Ácido fólico alimentos: ¿cuáles son los que más contienen?
En España, se recomienda el inicio de la ingesta de suplementos de ácido fólico un mes antes de la gestación. Siempre se ha considerado que la dieta española mayoritariamente es la dieta mediterránea, rica en frutas y verduras; y por lo tanto, rica en sustancias denominadas folatos, de la misma familia que el ácido fólico. Pero hay que tener en cuenta que, con el cambio de hábitos alimentarios de la población española, se está abandonando la dieta mediterránea, disminuyendo la ingesta de éstas sustancias.
Saber cuáles son los alimentos ricos en ácido fólico es fundamental para incluirlos en la dieta y aprovechar todos sus beneficios. Podemos destacar:
- Lentejas: con 0,234 mg por cada taza*
- Cacahuetes: con 0,22 mg por cada taza*
- Garbanzos: con 0,37 mg por cada taza*
- Espinacas: 0,286 mg por cada taza* cocinada
- Brócoli: 0,22 mg por cada taza*
- Hígado de ternera: 0,266 mg por cada 100 gramos
- Espárragos verdes: 0,226 mg por cada taza*
- Semillas de girasol: 0,476 mg por cada taza*
- Lechuga: 0,16 mg por cada 10 hojas
*Cada taza corresponde aproximadamente con 200g.
Fuente: Enfamil
En definitiva, el ácido fólico es un nutriente esencial para mejorar tu salud y, sobre todo, el desarrollo del bebé.
Esperamos que esta información te sirva para conocer la importancia del ácido fólico en el embarazo y te sea de mucha utilidad. ¡Nos leemos!